¿Cómo maridar comido rápida con vino? Estos son los principales puntos en los que debes fijarte.
El carménère es uno de los vinos que más sorprende a quienes visitan Chile. Aunque se llegó a creer que su uva estaba extinta, reapareció por sorpresa en el país, en una zona muy lejana a la de su origen. Te contamos más sobre esta variedad.
Vino carménère, maridaje, aroma y suavidad son palabras que suelen evocar quienes reconocen el potencial de esta cepa, cuya historia es bastante curiosa.
Llegó a ser una variedad muy famosa durante el siglo XVIII, en la región de Burdeos, pero fue atacada en 1860 por la filoxera (un insecto parásito que se come las hojas y las raíces de la vid).
La plaga obligó a los enólogos franceses a empezar desde cero, sobre todo con nuevas plantaciones de merlot, cabernet sauvignon y carménère. Pero esta última, no resistió las lluvias ni el frío de la primavera, por lo que terminó extinguiéndose.
Aunque no todo estaba perdido, pues la uva sería encontrada en 1991, en la zona central de Chile. Milagrosamente, antes de que la filoxera afectara los viñedos franceses, algunas cepas llegaron a estas latitudes gracias a los enólogos europeos que decidieron emigrar.
Pero la carménère fue sembrada en medio de plantaciones de merlot, por lo que pasó desapercibida durante años, al ser confundida con dicha variedad.
Debido a eso, se cosechaba antes de alcanzar su punto ideal de madurez y, por ende, su mayor potencial para poder ubicarse entre los mejores vinos del mundo.
Actualmente, es el vino chileno por excelencia, pues en este país encontró valles como el Colchagua, propicios para una uva que se deshidrata con facilidad y requiere de zonas cálidas y suelos que retengan el agua.
Este vino tinto tiene, generalmente, notas de frutos negros, ciruelas maduras, pimienta blanca y, en ocasiones, de pimentones rojos asados.
Si es 100% carménère, tendrá sabores a frambuesa y a granada, además de notas de pimiento verde.
Es de cuerpo medio, suave y sedoso. En cuanto a las uvas, estas suelen ser muy pequeñas y conformar racimos de tamaño mediano.
En el caso del Carménère Reserva Orgánico de Veramonte, sus plantaciones están ubicadas en la reconocida zona de Marchigüe, donde existen óptimas condiciones para su desarrollo.
Es un vino de gran concentración y estructura, con notas de ciruela y mora y toques de romero y pimienta. Es ideal para combinarlo con currys, carnes rojas, pastas rellenas y fajitas tipo tex-mex.
Ahora, si quieres aventurarte con un maridaje de carménère más osado, te recomendamos el atún sellado con salsa teriyaki o el queso camembert asado con reducción de berries.
Puedes revisar las preparaciones e ingredientes aquí.
El carménère es un cruce entre cepas antiguas como gros cabernet (híbrida de servadou y txakoli) y cabernet franc. Se conoce también con el sinónimo grande vidure.
Su nombre se refiere al color rojo carmín de sus hojas y bayas, así como al tinto de su vino.
Ahora que estás más familiarizado con todo lo relacionado con el carménère: maridaje características, historia y datos curiosos…
¿Se te antoja una copa?
¡Pruébala y dinos qué te parece!
¿Cómo maridar comido rápida con vino? Estos son los principales puntos en los que debes fijarte.
Paella, gazpacho, atún con salsa de frutos rojos y pasto con pesto de albahaca. Cuatro alternativas para disfrutar en el verano.
¿No sabes qué regalar a un fanático del vino? Aquí te damos ideas para distintos presupuestos.
